Para contestar esta pregunta, primero debemos dejar de lado la religión, porque ya sabemos que -por ejemplo- en la religión católica un arrepentimiento sincero en el último momento te permite ser perdonado de todos tus pecados.
Así que dejamos de lado la religión y nos centramos en el perdón humano, en el hecho de perdonar como: "Remitir la deuda, ofensa, falta, delito u otra cosa."
A primera vista se puede pensar que la respuesta es fácil, hay cosas que no se pueden perdonar. ¿Seguro? ¿Y si te compro el perdón? ¿Y si el perdón te reporta grandes beneficios? En este caso el asunto ya no es tan simple.
Aún así, es posible que pienses que hay cosas horribles que se pueden hacer y que son del todo imperdonables, como por ejemplo una violación o un asesinato. Pues si piensas así, estás muy equivocado. A lo largo de la historia se han realizado actos a priori imperdonables que por contra han sido perdonados. Y no hay que irse a la oscura edad media para obtener ejemplos, tenemos un caso que viene como anillo al dedo, en mitad del siglo XX.
Es conocido por todos las barbaridades que cometieron en la Segunda Guerra Mundial (1939-1945) los nazis en los campos de concentración, donde torturaban, experimentaban y mataban a miles de seres humanos. Pero no es tan conocido lo que ocurría al otro lado del mundo, con sus aliados los Japoneses.
Estos también tenían sus campos de concentración en los que experimentar. En concreto el más tristemente famoso fue el "Escuadrón 731", que oficialmente se llamaba "Laboratorio de Investigación y Prevención Epidémica del Ministerio Político Kempeitai" y su misión fue la investigación y desarrollo de armas biológicas para el ejército Japonés.
Lo peor no solo era el ya terrible -de por si- objetivo final de conseguir crear nuevas armas biológicas, sino lo verdaderamente terrible y horrible eran los métodos de experimentación que utilizaban para ello.
El Escuadrón 731, realizaba con los prisioneros mayoritariamente chinos, vivisecciones (disección sin anestesia para no afectar a los resultados) de diferentes órganos, congelación de distintas partes del cuerpo para ver su evolución, pruebas de la efectividad de distintas armas (como granadas por ejemplo), se les infectaban con distintos patógenos y no se les trataba para ver que pasaba, experimentaban con embarazadas (la mayoría fruto de las violaciones de los carceleros) y sus fetos, se hacían todo tipo de experimentos a cuales más atroces, como comprobar cuanto tiempo tarda en morir una persona por congelación o por estar colgada cabeza a bajo, de hambre, de sed, etc.
Experimentos que ni intentando imaginar ser un sádico desquiciado soy capaz de idear. Y tampoco quiero reproducir aquí un listado de las bestialidades, barbaridades (y demás adjetivos igualmente aplicables) que realizaron. Si quieres leer estos detalles puedes hacerlo en este enlace , además si tienes un buen estómago puedes ver la película basada en lo que hacía el Escuadrón 731, "Los hombres detrás del sol", la cual no es apta para personas sensibles.
Solo el Escuadrón 731 (que no era el único), causo más de 3.000 muertes con sus experimentos y unas 200.000 muertes de chinos contagiados de cólera, peste bubónica, etc.
Hay que indicar que el Escuadron 731 ha sido denunciado a las Naciones Unidas por crímenes de Guerra.
¿Y que mente desequilibrada estaba al frente de esta pesadilla? Pues fue Ishii Shiro, doctor en medicina, microbiología y Teniente-General del ejército Japonés.
Vale, pero la guerra terminó y los alemanes y los japoneses perdieron, ¿que pasó con Ishii Shiro?, ¿fue capturado y condenado?, Sí y no.
Me explico, fue capturado, pero tuvo la grandísima suerte de ser capturado por los militares estadounidenses y no por los rusos. Ya que los rusos tenía la costumbre de condenar y ejecutar a los criminales de guerra, postura que no compartían enteramente los estadounidenses.
Aquí es donde entra el juego del perdón a cambio de un beneficio. Los militares estadounidenses le propusieron perdonarle todas las monstruosidades que había cometido él y las cometidas bajo sus ordenes, a cambio de que le proporcionara a EE.UU. toda la información que había adquirido mediante sus salvajes experimentos. Obviamente Ishii Shiro, no se lo pensó dos veces y aceptó. Por lo que todas las barbaridades imperdonables que había cometido fueron perdonadas sin tener que pasar por ningún tribunal, pero no solo se le perdonó, sino que EE.UU. lo recibió con los brazos abiertos y le dieron trabajo, siendo uno de los responsables del programa de Armamento Biológico Estadounidense.
Este no fue ni un caso excepcional ni aislado al finalizar la Segunda Guerra Mundial. Como dije antes, los rusos tenía la "manía" de llevar ante un tribunal a los criminales de guerra y si se consideraban culpables se les ejecutaba. Lo militares estadounidenses con una mentalidad más, como llamarla... "práctica", crearon la "Operación Paperclip".
La Operación Paperclip, en pocas palabras y resumiendo mucho, tenía como objetivo adelantarse a los rusos para identificar y localizar a los científicos nazis más destacado y ficharlos en su equipo, por supuesto perdonando cualquier cosa que antes hubiesen hecho. Con esta operación se llevaron completamente en secreto a EE.UU. 700 científicos nazis y sus familias. Alrededor de la Operación Paperclip se desarrollaron otras operaciones encaminadas a más de lo mismo, pero especializándose en diferentes ramas de la ciencia.
El cerebro de la Operación Paperclip (aunque podría haberse llamado la "operación te lo perdono todo si vienes conmigo") fue Allen Welsh Dulles, que era abogado y luego fue director de la CIA. Pero en 1942 era abogado de Prescott Sheldon Bush (padre y abuelo de los dos presidentes de apellido Bush), y se encargo de que la prensa no mencionara el nombre de la familia Prescott Bush, la cual se había constatado oficialmente que habían contribuido al esfuerzo de guerra nazi, ya que grandes partes del imperio Bush, operaron para la Alemania nazi durante la Segunda Guerra Mundial.
Aunque desgraciadamente no son los únicos que ayudaron a la Alemania nazi, por ejemplo IBM con sus tarjetas perforadas, ayudó en la automatización de la maquinaria nazi, no solo permitía la puntualidad de los trenes sino que automatizó el control del censo usado en la persecución judía, facilitando una gestión más eficaz y rápida en la tarea de controlar el exterminio en los campos de concentración y permitir manejar cifras enormes.
Otros que se lucraron con la Alemania nazi, por ejemplo, fue la ahora prestigiosa marca Hugo Boss, la cual suministraba los uniforme al ejército alemán, como el famoso uniforme de las SS.
Volviendo a los científicos perdonados; uno de esos 700 científicos acogidos en secreto por EE.UU., fue el que diseño los cohetes-bomba V2, que se lanzaron sobre Londres e Inglaterra y que tenían objetivos civiles, para alcanzar la máxima destrucción tanto física como moral del enemigo. No se usaron para objetivos militares, digamos que... por falta de puntería. El científico nazi era Wernher Magnus Maximilian Freiherr von Braun, que trabajo posteriormente para la NASA, siendo el diseñador del Saturno V, que puso al hombre en la Luna.
¿Esto no lleva a hacer cierta la frase de "el fin justifica los medios"? En el caso de Ishii Shiro, por ejemplo, donde la información que obtuvo fue mediante métodos tan inhumanos, al perdonarlo y usar su trabajo el ejercito estadounidense, ¿no se hace cómplice de ello? Si la moral estadounidense no permitía realizar ese tipo de experimentación con humanos -como si lo permitía la japonesa-, ¿como se pueden permitir luego utilizarla? ¿no la están de esta manera ratificando?
Después de todo esto, podemos contestar a la pregunta del principio; ¿se puede perdonar todo?. La respuesta desgraciadamente es: "Sí, solo es cuestión de acordar un precio."
Así que dejamos de lado la religión y nos centramos en el perdón humano, en el hecho de perdonar como: "Remitir la deuda, ofensa, falta, delito u otra cosa."
A primera vista se puede pensar que la respuesta es fácil, hay cosas que no se pueden perdonar. ¿Seguro? ¿Y si te compro el perdón? ¿Y si el perdón te reporta grandes beneficios? En este caso el asunto ya no es tan simple.
Aún así, es posible que pienses que hay cosas horribles que se pueden hacer y que son del todo imperdonables, como por ejemplo una violación o un asesinato. Pues si piensas así, estás muy equivocado. A lo largo de la historia se han realizado actos a priori imperdonables que por contra han sido perdonados. Y no hay que irse a la oscura edad media para obtener ejemplos, tenemos un caso que viene como anillo al dedo, en mitad del siglo XX.
Es conocido por todos las barbaridades que cometieron en la Segunda Guerra Mundial (1939-1945) los nazis en los campos de concentración, donde torturaban, experimentaban y mataban a miles de seres humanos. Pero no es tan conocido lo que ocurría al otro lado del mundo, con sus aliados los Japoneses.
Estos también tenían sus campos de concentración en los que experimentar. En concreto el más tristemente famoso fue el "Escuadrón 731", que oficialmente se llamaba "Laboratorio de Investigación y Prevención Epidémica del Ministerio Político Kempeitai" y su misión fue la investigación y desarrollo de armas biológicas para el ejército Japonés.
Lo peor no solo era el ya terrible -de por si- objetivo final de conseguir crear nuevas armas biológicas, sino lo verdaderamente terrible y horrible eran los métodos de experimentación que utilizaban para ello.
El Escuadrón 731, realizaba con los prisioneros mayoritariamente chinos, vivisecciones (disección sin anestesia para no afectar a los resultados) de diferentes órganos, congelación de distintas partes del cuerpo para ver su evolución, pruebas de la efectividad de distintas armas (como granadas por ejemplo), se les infectaban con distintos patógenos y no se les trataba para ver que pasaba, experimentaban con embarazadas (la mayoría fruto de las violaciones de los carceleros) y sus fetos, se hacían todo tipo de experimentos a cuales más atroces, como comprobar cuanto tiempo tarda en morir una persona por congelación o por estar colgada cabeza a bajo, de hambre, de sed, etc.
Experimentos que ni intentando imaginar ser un sádico desquiciado soy capaz de idear. Y tampoco quiero reproducir aquí un listado de las bestialidades, barbaridades (y demás adjetivos igualmente aplicables) que realizaron. Si quieres leer estos detalles puedes hacerlo en este enlace , además si tienes un buen estómago puedes ver la película basada en lo que hacía el Escuadrón 731, "Los hombres detrás del sol", la cual no es apta para personas sensibles.
Solo el Escuadrón 731 (que no era el único), causo más de 3.000 muertes con sus experimentos y unas 200.000 muertes de chinos contagiados de cólera, peste bubónica, etc.
Hay que indicar que el Escuadron 731 ha sido denunciado a las Naciones Unidas por crímenes de Guerra.
¿Y que mente desequilibrada estaba al frente de esta pesadilla? Pues fue Ishii Shiro, doctor en medicina, microbiología y Teniente-General del ejército Japonés.
Vale, pero la guerra terminó y los alemanes y los japoneses perdieron, ¿que pasó con Ishii Shiro?, ¿fue capturado y condenado?, Sí y no.
Me explico, fue capturado, pero tuvo la grandísima suerte de ser capturado por los militares estadounidenses y no por los rusos. Ya que los rusos tenía la costumbre de condenar y ejecutar a los criminales de guerra, postura que no compartían enteramente los estadounidenses.
Aquí es donde entra el juego del perdón a cambio de un beneficio. Los militares estadounidenses le propusieron perdonarle todas las monstruosidades que había cometido él y las cometidas bajo sus ordenes, a cambio de que le proporcionara a EE.UU. toda la información que había adquirido mediante sus salvajes experimentos. Obviamente Ishii Shiro, no se lo pensó dos veces y aceptó. Por lo que todas las barbaridades imperdonables que había cometido fueron perdonadas sin tener que pasar por ningún tribunal, pero no solo se le perdonó, sino que EE.UU. lo recibió con los brazos abiertos y le dieron trabajo, siendo uno de los responsables del programa de Armamento Biológico Estadounidense.
Este no fue ni un caso excepcional ni aislado al finalizar la Segunda Guerra Mundial. Como dije antes, los rusos tenía la "manía" de llevar ante un tribunal a los criminales de guerra y si se consideraban culpables se les ejecutaba. Lo militares estadounidenses con una mentalidad más, como llamarla... "práctica", crearon la "Operación Paperclip".
La Operación Paperclip, en pocas palabras y resumiendo mucho, tenía como objetivo adelantarse a los rusos para identificar y localizar a los científicos nazis más destacado y ficharlos en su equipo, por supuesto perdonando cualquier cosa que antes hubiesen hecho. Con esta operación se llevaron completamente en secreto a EE.UU. 700 científicos nazis y sus familias. Alrededor de la Operación Paperclip se desarrollaron otras operaciones encaminadas a más de lo mismo, pero especializándose en diferentes ramas de la ciencia.
El cerebro de la Operación Paperclip (aunque podría haberse llamado la "operación te lo perdono todo si vienes conmigo") fue Allen Welsh Dulles, que era abogado y luego fue director de la CIA. Pero en 1942 era abogado de Prescott Sheldon Bush (padre y abuelo de los dos presidentes de apellido Bush), y se encargo de que la prensa no mencionara el nombre de la familia Prescott Bush, la cual se había constatado oficialmente que habían contribuido al esfuerzo de guerra nazi, ya que grandes partes del imperio Bush, operaron para la Alemania nazi durante la Segunda Guerra Mundial.
Aunque desgraciadamente no son los únicos que ayudaron a la Alemania nazi, por ejemplo IBM con sus tarjetas perforadas, ayudó en la automatización de la maquinaria nazi, no solo permitía la puntualidad de los trenes sino que automatizó el control del censo usado en la persecución judía, facilitando una gestión más eficaz y rápida en la tarea de controlar el exterminio en los campos de concentración y permitir manejar cifras enormes.
Otros que se lucraron con la Alemania nazi, por ejemplo, fue la ahora prestigiosa marca Hugo Boss, la cual suministraba los uniforme al ejército alemán, como el famoso uniforme de las SS.
Volviendo a los científicos perdonados; uno de esos 700 científicos acogidos en secreto por EE.UU., fue el que diseño los cohetes-bomba V2, que se lanzaron sobre Londres e Inglaterra y que tenían objetivos civiles, para alcanzar la máxima destrucción tanto física como moral del enemigo. No se usaron para objetivos militares, digamos que... por falta de puntería. El científico nazi era Wernher Magnus Maximilian Freiherr von Braun, que trabajo posteriormente para la NASA, siendo el diseñador del Saturno V, que puso al hombre en la Luna.
¿Esto no lleva a hacer cierta la frase de "el fin justifica los medios"? En el caso de Ishii Shiro, por ejemplo, donde la información que obtuvo fue mediante métodos tan inhumanos, al perdonarlo y usar su trabajo el ejercito estadounidense, ¿no se hace cómplice de ello? Si la moral estadounidense no permitía realizar ese tipo de experimentación con humanos -como si lo permitía la japonesa-, ¿como se pueden permitir luego utilizarla? ¿no la están de esta manera ratificando?
Después de todo esto, podemos contestar a la pregunta del principio; ¿se puede perdonar todo?. La respuesta desgraciadamente es: "Sí, solo es cuestión de acordar un precio."
4 comentarios:
Genial artículo.
Totalmente de acuerdo con tus conclusiones, más que perdón podríamos hablar de complicidad...
Las infinitas escalas de grises entre el bien y el mal a veces te hacen perder la noción de dónde te encuentras, ¿somos nosotros los "buenos"? ¿Cuándo reconoceremos que simplemente somos menos malos?
Creo que el perdón real debe ser desinteresado. Si no es así, y en la acción de perdonar subyace un interés, no creo que estemos ante un auténtico perdón, sino ante el cinismo de la sociedad que solo quiere ver aquello que es conforme con la moral de hojalata que nos imponen los políticos, los religiosos y la sociedad de consumo.
Ahora bien ¿Existe ese perdón desinteresado? ufff.. Qué difícil. Quizás los místicos o los ascetas lo hayan conseguido, pero para el resto de los humanos lo veo difícil...
Saludos
Me duele decir esto, pero Japón se mereció hasta la última onda de radiación de las bombas atómicas de Hiroshima y Nagasaki. Si yo estuviese en el poder, no hubiese lanzado una, sino todo mi arsenal nuclear y hubiese barrido a Japón de la faz de la tierra.
Pienso que esto ya no pasa a ser perdón sino conveniencia. El perdón es sin interés alguno, los estadounidenses se beneficiaron directamente de todos los crímenes de guerra cometidos y obviamente de la información de los mismos. Ahora le pregunto al que escribió el artículo;¿ si matan a tu familia, tu los perdonarías? Quizás tu no pero también quizás los que hicieron eso son militares que reciben una medalla por haberlo echo. Así es el mundo, está lleno de mentes enfermas y lo peor es que tienen mucho poder. Saludos
Soy ateo pero, nos dices que dejemos de lado la religión? Y nos tenemos que acoger a este suceso para contestar a la pregunta? A parte de que das por echo que son los estadounidenses los que deben de perdonar cuando ese atributo les corresponde a cada uno de los familiares y amigos de las víctimas, si tu respuesta a la pregunta ¿se puede perdonar todo? es: "Sí, solo es cuestión de acordar un precio.
Estas aprobando y dando por válida la decisión del gobierno americano. Que estos actuaran así no significa que tenga cabida entre una de las correctas actuaciones según las leyes morales y del bien común. No se perdona por dinero se perdona de corazón y a quien corresponda
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